Durante un patrullaje preventivo en la zona posterior del Complejo Deportivo Municipal, dos efectivos policiales de la Unidad de Prevención protagonizaron un rescate que evitó una tragedia.
El Suboficial Mayor Ramón Aybar y la Cabo Primero Erika Chaile realizaban una recorrida a pie cuando una vecina, visiblemente alterada, los alertó sobre tres menores que se encontraban en el mar y en riesgo de ahogarse. Sin dudarlo, ambos ingresaron al agua y lograron poner a salvo a los niños, quienes fueron entregados sanos y salvos a sus familiares presentes en el lugar.
El accionar de Aybar y Chaile fue fundamental, demostrando profesionalismo y compromiso en un momento crítico. Desde la Policía de Santa Cruz se destacó la valentía de los efectivos, cuyo desempeño permitió evitar un desenlace fatal.
Llamado a la precaución
Tras el incidente, se reiteró a la comunidad la necesidad de extremar las medidas de seguridad al realizar actividades recreativas en el agua, especialmente en zonas no habilitadas. "Es fundamental bañarse en áreas supervisadas por guardavidas y mantener una vigilancia constante sobre los menores para evitar este tipo de situaciones", recordaron las autoridades.
Este episodio no solo resalta la importancia de la labor policial preventiva, sino también su rol en la protección directa de la vida, evidenciando el compromiso de las fuerzas de seguridad con la comunidad.
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