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Vie, May

Educación

La carrera fue modificada en función del Artículo 43 de la Ley de Educación Superior. El Consejo Directivo de esta Escuela avanzó en diversas definiciones para que la transición no afecte la trayectoria académica de los estudiantes. Los cambios entrarán en vigencia en 2018.

El Consejo Directivo de la Escuela de Enfermería de la Universidad Nacional de la Patagonia Austral se reunió el martes último en Río Gallegos para proyectar la implementación, a partir del periodo académico 2018, del nuevo plan de estudios de la carrera de Licenciatura en Enfermería, que se encuentra en proceso de acreditación ante la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria.

En la reunión del Consejo Directivo, que fue presidida por la secretaria general académica de la UNPA, Dra. María Elena Bain, se avanzó en temas relativos a la transición entre los planes de estudios, la migración de datos de los alumnos que se vean alcanzados por el cambio, las equivalencias y la fecha de corte, entre otros.

La UNPA ofrece actualmente la Licenciatura en Enfermería en la Unidad Académica Río Gallegos y la carrera de Enfermería Universitaria en esta sede y en las unidades académicas Río Turbio y San Julián. Si bien la acreditación alcanza a la formación de grado – en los términos del Artículo 43de la Ley de Educación Superior- la transición afectará a todo el alumnado, dado que se trata de un único plan de estudios con titulación intermedia.

El encuentro de la semana pasada está comprendido además en un cronograma de reuniones que alcanzará a los consejos directivos de las 14 Escuelas de la universidad, cuya integración se modificó total o parcialmente luego de las elecciones de directores y miembros de los consejos asesores del pasado 6 de octubre.

Por ello, en esta oportunidad asistieron los directores de sede de la UARG, Daniel Romero; la UART, Nilda Chaura y la UASJ, Marta Aliaga y se sumaron al trabajo las vicedecanas de estas dos últimas sedes, Margarita Vera y Natalia Collm y autoridades de las secretarías académicas respectivas.

Definiciones

Daniel Romero, director de la Sede UARG de la Escuela de Enfermería, explicó que para el cambio del plan de estudios “se trabajó de manera paralela y simultanea la adecuación, la articulación y también la actualización de los contenidos mínimos, según los requerimientos de los estándares de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria”.

Respecto del trabajo desarrollado en la reunión, Romero indicó que el objetivo es “acercar la realidad de cada una de las sedes y las particularidades de cada uno de los estudiantes que están en proceso de formación y establecer una serie de decisiones para lograr una transición más amena, exitosa y no entorpecer la proyección académica de cada uno de ellos”.

En este contexto, detalló que entre los principales cambios se cuentan “la actualización de ciertos contenidos, la incorporación de algunos espacios curriculares que creemos que son necesarios y la incorporación de dos prácticas integradas, una al finalizar la formación de pre- grado y la segunda, que implica el trabajo efectivo en terreno, para los estudiantes que van a obtener el título de Licenciado”.

Por su parte, la directora de sede de la UASJ, Marta Aliaga señaló que una de las definiciones que adoptó el Consejo Directivo fue que “los estudiantes que van a poder finalizar con el plan viejo son aquellos que tengan 12 de las 15 materias aprobadas”, mientras que los que no cumplan con ese requisitos en los próximos meses “van a tener que hacer la homologación de un plan a otro”.

“Lo primero que preguntan los alumnos es cuánto se incrementa la cantidad de materias, pero en realidad se lo toman bastante bien y nosotros estamos tratando en la Unidad Académica Río Turbio de acompañar, porque ahora muchos están apurados en sacar materias para quedarse en el viejo plan”, contó Nilda Chaura, directora de la sede UART, quien aclaró que en realidad “aumenta el número de materias, pero no la carga horaria”.

El Artículo 43 de la Ley de Educación Superior alcanza a aquellas profesiones reguladas por el Estado cuyo ejercicio pudiera comprometer el interés publico, poniendo en riesgo de modo directo la salud, la seguridad, los derechos, los bienes o la formación de los habitantes y en función de ello el Ministerio de Educación define en los criterios y estándares para la acreditación de cada carrera, incluyendo contenidos curriculares básicos e intensidad de las prácticas, entre otros aspectos.