La enfermedad de Parkinson es una dolencia neurodegenerativa provocada por la pérdida de neuronas productoras de dopamina, un neurotransmisor crucial para el control motor y la función cognitiva.
Con el envejecimiento de la población mundial, la cantidad de personas afectadas por esta enfermedad ha aumentado considerablemente. La principal causa del Parkinson es el daño neuronal debido a la excesiva producción de especies reactivas de oxígeno (ROS).
La reducción de ROS es fundamental, ya que estas especies son mortales para las neuronas dopaminérgicas. Actualmente, los tratamientos disponibles solo alivian los síntomas, por lo que es urgente desarrollar nuevos métodos de prevención y tratamiento.
En este contexto, la profesora adjunta Akiko Kojima-Yuasa de la Escuela de Posgrado de Vida Humana y Ecología de la Universidad Metropolitana de Osaka, lideró un estudio sobre el impacto de los polifenoles de Ecklonia cava, antioxidantes provenientes de algas marinas, en la prevención del Parkinson. Este estudio fue publicado en la revista Nutrients.
La investigación incluyó dos tipos de pruebas de función motora en ratones modelo de Parkinson, a los que se les administraron antioxidantes por vía oral durante una semana, seguido de rotenona. Los resultados mostraron una notable recuperación de la función motora que había disminuido debido a la rotenona. Además, se observó una mejora en la función motora intestinal y en la estructura de la mucosa del colon.
Los experimentos celulares con modelos de Parkinson también confirmaron la interacción bioquímica del efecto preventivo de la Ecklonia cava. Los antioxidantes demostraron activar la enzima AMPK (proteína quinasa activada por adenosina monofosfato), un sensor de energía intracelular, y suprimir la producción de ROS, que causan la muerte de las células neuronales.
"Este estudio sugiere que los antioxidantes de la Ecklonia cava pueden mitigar el daño neuronal mediante la activación de la AMPK e inhibir la producción intracelular de especies reactivas de oxígeno", afirmó la profesora Kojima-Yuasa. "Se espera que la Ecklonia cava sea un componente eficaz en la prevención de la enfermedad de Parkinson".
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