La Ministra de Capital Humano, Sandra Petovello, tomó la decisión de despedir a Pablo de la Torre por su presunta responsabilidad en el desabastecimiento de alimentos en comedores y merenderos populares. Esta medida se produce en medio de una situación de pobreza que afecta al 49% de la población argentina.
Según declaraciones de la propia funcionaria, Sandra Pettovello, De la Torre fue señalado como responsable del acopio de alimentos próximos a vencer en galpones ubicados en Villa Martelli y Tafí Viejo, comprados por la gestión anterior. En un comunicado oficial, Pettovello reconoció que se detectó la proximidad del vencimiento de estos alimentos durante una auditoría interna realizada por el Ministerio.
Además del despido de De la Torre, la funcionaria presentó una denuncia ante la Oficina Anticorrupción, involucrando no solo al exsecretario sino también a sus subsecretarios por una serie de contratos con la Organización de Estados Iberoamericanos (OIE), que presuntamente operaba como intermediaria en la compra de alimentos, quedándose con un porcentaje por "gastos administrativos".
Ante la situación de crisis, se anunció que el protocolo de distribución de alimentos estará a cargo del Ejército Argentino. Pettovello inició un proceso de búsqueda de responsables por no informar sobre la situación de la mercadería, destacando que "todo necesita la firma de la ministra".
Horas previas a su destitución, De la Torre se había pronunciado en redes sociales contra Juan Grabois, desatando una polémica aún mayor en torno al manejo de los recursos alimentarios. De la Torre, vinculado estrechamente al ala dura del PRO y a Patricia Bullrich, había llegado al gabinete de Milei por sus ideales ligados a la Iglesia Católica y su oposición al aborto legal.
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