Este martes, una gran marcha que reunía a diversos sectores de la sociedad en la capital de Jujuy fue reprimida cuando se dirigía hacia la Legislatura para protestar contra la reforma parcial de la Constitución provincial, que estaba siendo tratada y jurada en su interior.
El operativo policial se llevó a cabo poco después de las 11 de la mañana, a unos 200 metros del parlamento provincial, donde el gobernador Gerardo Morales encabezaba la sesión para la jura de la reforma constitucional.
Inicialmente, la ceremonia de juramento estaba programada para la tarde, a las 18:30 horas, en el Teatro Mitre de la ciudad de San Salvador de Jujuy. Sin embargo, se adelantó para la mañana debido al clima de protestas que se vivía en rutas y calles de toda la provincia.
Los efectivos de infantería de la policía jujeña se enfrentaron con los manifestantes, empleando balas de goma y gases lacrimógenos, generando un ambiente de tensión en la capital. Algunos manifestantes intentaron ingresar al edificio de la Legislatura y se produjeron incendios en algunas de sus instalaciones.
Mientras tanto, en el interior del edificio, los convencionales constituyentes votaron y juraron el nuevo texto de la reforma constitucional. El gobernador Gerardo Morales anunció la entrada en vigencia de la nueva Constitución de la provincia de Jujuy y dio por finalizada la tarea de la convención constituyente.
La reforma constitucional, y en particular el artículo 67 que prohíbe los cortes de rutas y calles, ha generado un clima de protestas en las calles, encabezadas por docentes y trabajadores estatales, que expresan consignas como "arriba los salarios, abajo la reforma".
Ante la represión y la falta de garantías para el ejercicio del derecho a la protesta, la Secretaría de Derechos Humanos emitió un comunicado en el que expresó su preocupación y presentó un habeas corpus colectivo y preventivo. Además, se ha solicitado la intervención del Partido Justicialista de Jujuy.
Diversos organismos de derechos humanos, movimientos sociales, diputados nacionales y dirigentes sindicales han repudiado la brutal represión sufrida por el pueblo jujeño y han denunciado el accionar de las fuerzas de seguridad bajo el gobierno de Morales.
La situación en Jujuy continúa siendo motivo de preocupación, y en respuesta a la represión, la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) ha convocado a un paro nacional para el jueves, con la adhesión de otros sindicatos y organizaciones. La lucha por los derechos y la resistencia contra la reforma constitucional en Jujuy continúan.
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