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03
Mar, Dic

Interés General

El poder adquisitivo de las familias argentinas están una caída histórica, alcanzando niveles que no se registraban desde la crisis del 2001.

Según un informe del Instituto Interdisciplinario de Economía Política de la UBA, el salario mínimo vital y móvil (SMVM) perdió un 1,3% en octubre y acumuló una disminución real del 28% entre noviembre de 2023 y el mismo mes de este año.

Esta caída representa la erosión más significativa de los ingresos desde la crisis de la convertibilidad, y es producto de una inflación acumulada que se disparó con un pico del 25,5% en diciembre pasado tras una devaluación abrupta, además de los ajustes tarifarios que siguieron impactando sobre el bolsillo de los trabajadores.

Un salario mínimo en mínimos históricos

El reporte "Panorama del empleo asalariado formal y de las remuneraciones" detalla que la contracción comenzó en diciembre de 2023, con una pérdida del 15% respecto al mes anterior, y se agravó en enero con una caída adicional del 17%. Aunque en los meses posteriores el incremento nominal acompañó la inflación, evitando mayores caídas, en junio volvió a contraerse (4,4%) y continuó con reducciones consecutivas en los meses siguientes.

En comparación, el salario mínimo actual refleja una erosión del 60% frente al pico histórico registrado en septiembre de 2011, posicionándose incluso por debajo del nivel de 2001, antes de la crisis económica y social que marcó un quiebre en la historia argentina.

El panorama en el sector privado

El salario promedio de los trabajadores registrados también muestra un retroceso preocupante. A pesar de ligeras mejoras en agosto (+0,8%) y septiembre (+0,3%), el poder adquisitivo a septiembre de 2024 seguía siendo 1,5% menor al valor de noviembre del año anterior.

El análisis del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) revela una situación aún más crítica para los asalariados del sector privado: tras crecer en términos reales en junio (+4%) y julio (+2,8%), los ingresos cayeron un 2,5% en agosto y un 1% en septiembre, acumulando una pérdida del 20% respecto del máximo registrado en mayo de 2013.

Impacto y perspectivas

La clase media, históricamente considerada el motor de la economía argentina, es uno de los sectores más golpeados por esta pérdida de poder adquisitivo, con una creciente percepción de que sus ingresos ya no alcanzan para sostener el estilo de vida que alguna vez definió a este segmento de la sociedad.

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