Oslo, Noruega, Más de 300 renos salvajes fueron aniquilados por rayos en Noruega central, en lo que las autoridades de vida silvestre consideran una masacre natural inusual por su magnitud.
La Agencia Ambiental Noruega (Miljødirektoratet) difundió imágenes sobrecogedoras de cadáveres de renos desparramados en una zona pequeña de la meseta de Hardangervidda.
La agencia señaló que murieron 323 animales, incluidos 70 becerros, en la tormenta eléctrica del viernes 26 de agosto.
El vocero Kjartan Knutsen dijo a la agencia de noticias AP que la muerte de renos u otra fauna silvestre por rayos no es inusual, “pero jamás habíamos conocido semejantes cifras”.
Señaló que los renos tienden a juntarse cuando hay mal tiempo, lo cual explicaría la muerte de tantos al mismo tiempo.
Miles de renos migran a través de la árida meseta de Hardangervidda al cambiar las estaciones.
La alta humedad tanto en el suelo como en el aire probablemente explique por qué murieron tantos animales”, escribió en un comunicado Olav Strand, investigador del Instituto Noruega para la Investigación de la Naturaleza.
Expertos llegaron en helicópteros para tomar muestras de los renos muertos, como parte de un proyecto para monitorizar a alces y venados por enfermedades.
Cinco de los 323 animales fueron hallados vivos, pero con graves lesiones y fueron sacrificados por funcionarios de la agencia de vida silvestre.
Es parte de la ecología natural, esto es lejos de donde vive la gente”, comentó Strand.
Hardanger tiene cerca de 12 mil renos y los cazadores tienen permiso para abatir a 2 mil al año para abastecerse con carne.
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