fbpx
24
Mié, Abr

Ciencia y Tecnología

Unos investigadores han descubierto una técnica para reprogramar directamente células de la piel en células fotorreceptoras del tipo conocido como bastoncillo, empleadas por el ojo en el proceso de la visión.

Los bastoncillos obtenidos en el laboratorio permitieron a ratones ciegos detectar la luz después de que las células fueran trasplantadas a los ojos de los animales.

Tres meses después del trasplante, los estudios de inmunofluorescencia confirmaron la supervivencia de las células fotorreceptoras preparadas en el laboratorio, así como sus conexiones sinápticas con las neuronas de la zona más interna de la retina.

Este avance es obra del equipo de los doctores Anand Swaroop, del Instituto Nacional del Ojo (NEI), que es uno de los Institutos Nacionales estadounidenses de Salud (NIH), y Sai Chavala, presidente de la empresa CIRC Therapeutics en Estados Unidos.

Hasta ahora, los científicos han reemplazado las células fotorreceptoras moribundas en modelos animales mediante la formación de células madre a partir de células de la piel o de la sangre, programando esas células madre para que se conviertan en fotorreceptoras, que luego se trasplantan al fondo del ojo. En el nuevo estudio, los investigadores muestran que es posible saltarse el paso intermedio de las células madre y reprogramar directamente las células de la piel para que pasen a ejercer de fotorreceptoras y se las pueda trasplantar a la retina.

Tres meses después del trasplante, los estudios de inmunofluorescencia confirmaron la supervivencia de las células inducidas químicamente a ser similares a las fotorreceptoras. Estas nuevas células aparecen en color verde. Los análisis también demostraron la integración de las nuevas células en las capas de la retina de ratón. (Foto: Dr. Sai Chavala, CIRC Therapeutics)

"Este es el primer estudio en mostrar que la reprogramación química directa puede producir células similares a las de la retina, lo que nos aporta una nueva y más rápida estrategia con la que desarrollar terapias para tratar la degeneración macular relacionada con la edad y otros trastornos de la retina causados por la pérdida de fotorreceptores", explica Swaroop.

La reprogramación directa implica bañar las células de la piel en un cóctel de cinco compuestos químicos cuyas respectivas moléculas son pequeñas. Su acción conjunta regula químicamente del modo idóneo las vías moleculares relevantes para que las células pasen a ser como las fotorreceptoras del tipo conocido como bastoncillo. El resultado son bastoncillos que emulan a sus homólogos nativos en apariencia y función.

Aunque se necesita investigar más para optimizar el protocolo a fin de que se incremente la cantidad de células fotorreceptoras funcionales trasplantadas, el equipo de Swaroop y Chavala ya está planeando un ensayo clínico destinado a probar la terapia en humanos para enfermedades degenerativas de la retina, como la retinitis pigmentosa.

Fuente: www.nei.nih.gov

Si llegaste hasta acá tomate un descanso con la mejor música