La Policía detuvo a un hombre que intentó escapar tras ser sorprendido frente a un local nocturno. En su poder llevaba cocaína, marihuana y una suma importante de dinero. Hay sospechas de vínculos con el narcomenudeo local.
El hecho ocurrió alrededor de las 06:35 horas, sobre la Avenida Kirchner, casi esquina Sarmiento, cuando un móvil de la División Comando de Patrullas realizaba tareas de control por el cierre de boliches. Al pasar por la puerta del local nocturno “Candi Co.”, los efectivos vieron a cuatro sujetos con actitudes sospechosas.
Al notar la presencia policial, los individuos optaron por separarse y caminar a ritmo apurado. Uno de ellos intentó escapar directamente por la avenida e incluso trató de abordar un vehículo rojo que se desplazaba a baja velocidad, pero el conductor —por razones aún no esclarecidas— aceleró y lo dejó plantado.
En plena corrida, el hombre descartó una riñonera negra, un detalle que no pasó desapercibido. El objeto fue inmediatamente asegurado por los uniformados, quienes ya presumían la posible presencia de estupefacientes.
Requisa autorizada y droga asegurada
Minutos después, se activó el protocolo judicial. Intervino la Fiscalía, se solicitó la presencia de testigos civiles, y acudió personal especializado de la División Narcocriminalidad. Ya con orden del Juzgado Federal de Garantías, se procedió a la requisa del sospechoso y del bolso arrojado.
El resultado: más de 11 gramos de clorhidrato de cocaína, más de 7 gramos de cannabis sativa, y una suma que supera los 340 mil pesos en efectivo. Todo quedó secuestrado en el marco de la Ley Nacional N° 23.737, que regula los delitos vinculados al narcotráfico.
El detenido fue trasladado a la dependencia policial, mientras que se inició una causa en el fuero federal, bajo sospechas de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, aunque aún no se descarta el narcomenudeo como principal hipótesis.
Una postal repetida en la madrugada patagónica
Si bien el caso no tiene, por ahora, ramificaciones mayores, desde fuentes policiales no descartan que el grupo sorprendido tenga vínculos con el microtráfico local, una modalidad que —según investigaciones recientes— se ha ido sofisticando en ciudades chicas como Río Gallegos.
Lo llamativo fue la actitud del conductor del vehículo rojo, quien no solo se negó a recoger al sospechoso, sino que aceleró bruscamente, dejando entrever que podría haber estado involucrado o, por el contrario, quiso desvincularse rápidamente. Por el momento, no fue localizado.
Desde la fuerza indicaron que este tipo de procedimientos seguirán intensificándose durante los fines de semana, en el marco de operativos preventivos de saturación en zonas nocturnas.
Si llegaste hasta acá tomate un descanso con la mejor música