El pasado miércoles 10 del corriente, alrededor de las 09.30 horas, la Comisaria Segunda de Puerto San Julián, toma conocimiento sobre un principio de incendio que se estaba originando en un domicilio de calle Centenario al 500
Con la premura del caso, efectivos, se dirigen al lugar, encontrándose con un panorama siniestral desesperante en uno de los cinco departamentos existentes en el lugar.
Los primeros en llegar, Agentes Rodolfo TEJERINA de la Comisaria y el Agente Mario ROMERO, numerario de la Division Criminalistica Zona Centro, quién se encontraba en franco servicio. Observan que desde una ventana posterior del primer piso, se encontraba una niña golpeando el vidrio pidiendo ayuda. Rapidamente los efectivos mediante la utilización de una escalera precaria, generalmente utilizada por albañiles de obras, llegan hasta el primer piso que superaba los 2 metros de altura, siendo este el único acceso viable y rápido, debido al humo y llamas reinantes. Dichos numerarios ocasionan la destrucción de un ventanal grande y rescatan del interior de la vivienda, a una niña de 11 años y un niño de 3 años, este último desvanecido sobre el suelo.
Ante tal situación y en particular del niño que estaba inconsciente, producto del monóxido de carbono, efectivos del Comando Radioeléctrico, trasladan a los menores hacia el nosocomio local para su inmediata asistencia médica.
De dicha atención, se determina que el niño posee escoriaciones pequeñas, ingresando con intoxicación CO2 (monóxido de carbono), con poca respuesta a estímulos.Por su parte, la niña, posee dificultad respiratoria y quemadura tipo “A” sobre la espalda de 15 % de extensión de superficie de quemadura – lesión leve, quedando ambos internados. Hoy, la menor fue dada de alta, en tanto que el niño, continua internado evolucionando favorablemente.
Tambien, como consecuencia del operativo dos efectivos policiales de la Comisaria resultaron con lesiones de carácter leves, debido a cortes en las manos por vidrios existentes en el siniestro. De acuerdo a las primeras conclusiones arribadas por personal de la Unidad de Bomberos 3ra. de Puerto San Julián, el foco ígneo se habría producido por un accidente eléctrico, por la sobrecarga de varios aparatos electrónicos que estaban enchufados en una misma zapatilla de corriente (o derivador universal de corriente).-
Si bien estos actos son el deber propio a la función del Policía, es dable destacar el accionar de los efectivos, quienes actuaron con valor, profesionalismo y espíritu de sacrificio, arriesgaron su propia vida para salvar la de los dos niños en riesgo.