fbpx
29
Dom, Dic

Ciencia y Tecnología

Un nuevo ensayo clínico pionero abre esperanza de quienes sufren secuelas de lesiones cerebrales traumáticas. Se trata de un dispositivo que estimula las redes neuronales afectadas.

En el año 2001, Gina Arata experimentó un giro inesperado en su vida universitaria. Planeaba postularse a la facultad de derecho cuando un accidente automovilístico le causó una lesión cerebral traumática. Esta lesión comprometió su capacidad de concentración, afectando incluso tareas cotidianas como clasificar el correo en un trabajo. Sin embargo, un innovador ensayo clínico llevado a cabo por investigadores de Stanford Medicine ofrece esperanza a individuos como Arata que han sufrido lesiones cerebrales de moderadas a graves.

En 2018, Arata fue aceptada como participante en el ensayo clínico, donde se le implantó quirúrgicamente un dispositivo en su cerebro. Los médicos calibraron cuidadosamente la actividad eléctrica del dispositivo para estimular las redes que la lesión había afectado. Los resultados, publicados en Nature Medicine el 4 de diciembre, muestran avances significativos.

Para Arata y otros cuatro participantes, el dispositivo experimental restauró, en diferentes grados, las habilidades cognitivas perdidas debido a lesiones cerebrales traumáticas. La técnica, desarrollada por investigadores de Stanford Medicine, se destaca como la primera prometedora contra los impedimentos a largo plazo de estas lesiones.

Más de 5 millones de estadounidenses viven con los efectos duraderos de lesiones cerebrales traumáticas moderadas a graves, que incluyen dificultades para concentrarse, recordar y tomar decisiones. El estudio, liderado por Jaimie Henderson, MD, profesora de neurocirugía, apunta a reactivar sistemas cerebrales que han sido regulados a la baja.

La clave del éxito radica en la estimulación eléctrica precisa del núcleo lateral central en el tálamo, una región crítica para la regulación de la conciencia. Los participantes, que habían sufrido lesiones cerebrales de moderadas a graves hace más de dos años, experimentaron mejoras significativas en las pruebas cognitivas después de 90 días de tratamiento.

Este ensayo clínico es pionero en abordar de manera específica esta región del cerebro en pacientes con lesiones cerebrales traumáticas. Los investigadores planean avanzar en medidas sistemáticas para convertir esta terapia en una opción accesible para aquellos que han estabilizado su recuperación.

Las instituciones participantes incluyen Weill Cornell Medicine, el Hospital de Rehabilitación Spaulding de Boston, la Facultad de Medicina de Harvard y otras destacadas universidades. Estos avances ofrecen una luz de esperanza para aquellos que enfrentan las secuelas de lesiones cerebrales traumáticas a largo plazo.

Si llegaste hasta acá tomate un descanso con la mejor música