A pesar del Día del Padre y el aguinaldo, el consumo volvió a retroceder en junio. La incertidumbre golpea a las pymes y preocupa el fin del plan Cuota Simple.
Las ventas minoristas de las pymes retrocedieron un 0,5% interanual en junio, según el informe mensual de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Es la segunda caída consecutiva tras el descenso del 2,9% registrado en mayo. No obstante, el primer semestre del año cerró con un incremento acumulado del 9,1%, marcando una leve recuperación respecto al desplome del 17,2% del mismo período de 2024.
En la medición mensual desestacionalizada, las cifras también fueron negativas: el consumo cayó un 6,7% frente a mayo, consolidando tres meses seguidos de retrocesos.
Desde CAME indicaron que, si bien algunos sectores vieron “repuntes puntuales por el Día del Padre y el cobro del aguinaldo”, estos no lograron revertir la tendencia descendente general del mercado, caracterizado por fragilidad en la demanda y baja circulación de clientes en los comercios físicos.
“Se mantienen niveles de demanda en canales digitales y a través de estrategias de precios agresivos”, afirmó el reporte. “En sectores estacionales, las condiciones climáticas también aportaron positivamente al desempeño mensual”.
Sin embargo, el fin del programa Cuota Simple introdujo un nuevo obstáculo. Las pymes, que dependen del financiamiento en cuotas para sostener las ventas, se vieron obligadas a replantear su estrategia.
Como alternativa, CAME lanzó Cuotas MiPyme, un nuevo esquema que desde el 1° de julio permite ofrecer 3 o 6 pagos con tasas promocionales y sin tope de monto, abarcando los mismos rubros que el programa anterior.
Respecto a la situación económica general, el 58,3% de los comercios indicó que la situación se mantuvo respecto al año pasado, mientras que un 27,5% la calificó como peor. A futuro, la mitad de los encuestados cree que su panorama mejorará en 2026, aunque solo un 7,8% anticipa una caída.
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