El presidente Javier Milei, anunció este sábado un cambio en las operaciones del dólar en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) como parte de la fase dos de su plan económico para contener la base monetaria y reducir la inflación.
Desde Estados Unidos, donde se encuentra en una cumbre con multimillonarios, Milei explicó que el lunes se implementará un nuevo esquema monetario orientado a alcanzar la "emisión cero total".
Rodríguez, quien había sido asesor de Milei, ya había expresado fuertes críticas el mes pasado, comparando la tasa de devaluación actual con la "Tablita de Martínez de Hoz". Según Rodríguez, "La política cambiaria actual me recuerda a la de la Tablita de Martínez de Hoz (1978-81). La tasa de devaluación era prefijada en un nivel descendente. Ahora es un nivel constante de 2% mensual. La inflación precedente en ambos casos era mucho mayor", explicó.
Milei detalló que los pesos emitidos por la compra de dólares en el MULC serán "esterilizados" mediante la venta de dólares en el mercado, lo cual cerrará "el grifo" de pesos provenientes de las ventas de divisas en el frente externo. "Pasar de exceso de oferta cero a emisión cero implica cortar también la emisión por compra de dólares. Compramos dólares e inyectamos pesos y lo que hacemos es esterilizar los pesos colocando dólares en el mercado, y de esa manera nos aseguramos que la cantidad de dinero quede constante. Quiere decir que de acá en adelante la base monetaria en Argentina no crece más", afirmó Milei en una entrevista con LN+.
Esta medida se espera que impacte en la cotización del dólar contado con liquidación, mientras el Gobierno busca transmitir tranquilidad al mercado descartando una devaluación abrupta. Oficialmente, la estrategia es mantener el crawling peg al 2% y llevarlo a converger con la inflación, que aún se sitúa por encima del 4%.
En este contexto, Milei también anunció que esta semana se resolverá la cuestión de los "puts" y restó importancia a la tensión cambiaria de los últimos días, que elevó el dólar blue a $1.500. Con estas decisiones, el gobierno de Milei envía un mensaje claro: el objetivo es mantener la estabilidad monetaria sin incrementar la base monetaria.
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