El Gobierno decidió salir del congelamiento de suba de impuestos del mes pasado y actualizó los precios de la nafta y el gasoil. A partir del próximo sábado primero de junio, los combustibles aumentarán debido a una actualización de entre 1% y 1,5% en los impuestos permitidos por el Decreto 466, firmado por Javier Milei, Nicolás Posse y Luis Caputo.
Esta medida mantendrá prácticamente el congelamiento de precios en los surtidores, pero el aumento total podría ubicarse entre 1% y 3%.
Las petroleras definirán si a estos porcentajes de aumento, de entre 1% y 1,5%, se sumará la devaluación mensual habilitada por el Gobierno, que es del 2% mensual (crawling peg), y la variación del precio internacional del barril de crudo Brent. En abril, el petróleo cayó de u$s89,94 a u$s82,13, por lo que el incremento no debería superar el 2% o 3,5% en los surtidores a partir del sábado. "Incluso hay empresarios que hablan de un 'empate' este mes", comentaron fuentes del sector.
Además, se puede incorporar un ajuste adicional por la suba del precio de los biocombustibles. Recientemente, la Secretaría de Energía estableció que el litro de bioetanol a base de caña de azúcar tiene un precio de $622 y el elaborado a base de maíz, de $570. También se fijó un precio mínimo de $938.540 por tonelada para el biodiesel utilizado en la mezcla obligatoria con gasoil.
El aumento en junio se debe al vencimiento de la prórroga del Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y el Impuesto al Dióxido de Carbono (IDC) del último trimestre de 2023. El Poder Ejecutivo decidió descongelar estos impuestos, pero aplicar un porcentaje mucho menor a la inflación acumulada en los últimos tres meses del año pasado, que fue de 46,6%. Según el Decreto 466/2024, "resulta razonable diferir parcialmente los efectos de los incrementos que resultarían aplicables a partir del 1° de junio de 2024".
El Ministerio de Economía justificó esta medida con el objetivo de "estimular el crecimiento y garantizar un sendero fiscal sostenible". Sin embargo, a partir de julio, se trasladará el total de la inflación correspondiente a los primeros tres meses de 2024 a los precios de los combustibles.
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