El intendente de Río Gallegos, Pablo Grasso, visitó el galpón donde reposan todos los materiales necesarios para completar las obras de cloacas en 19 barrios de la ciudad. La iniciativa, que cuenta con más de 200 kilómetros de caños y cámaras de cemento, se encuentra actualmente paralizada debido a decisiones gubernamentales.
Los materiales están resguardados en un galpón cedido por la Armada Argentina, el cual, según el intendente, está destinado a convertirse en un microestadio una vez que se complete la obra de infraestructura básica. "Aquí tenemos todo listo para empezar, pero estamos a la espera de la luz verde del gobierno nacional", expresó Grasso durante su recorrido.
La obra de cloacas, financiada inicialmente por el gobierno anterior, quedó suspendida con el cambio de administración, generando incertidumbre entre los habitantes de los barrios afectados. "Nuestro objetivo es desbloquear esta situación lo antes posible para poder comenzar a instalar los caños apenas las condiciones climáticas lo permitan", aseguró el intendente.
Grasso destacó la importancia de completar estas obras para mejorar la calidad de vida de miles de vecinos que aún carecen de servicio de cloacas en la capital santacruceña. "Es una obra fundamental para la salud y el bienestar de nuestra comunidad", subrayó.
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