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Dom, Dic

Interés General

El Municipio entregó certificados de posesión en un acto encabezado por Pablo Grasso, destacando políticas de inclusión y planificación urbana.

En una ceremonia cargada de emoción y compromiso social, el intendente de Río Gallegos, Pablo Grasso, encabezó este jueves la entrega de certificados de posesión a 45 familias de la ciudad, correspondientes a terrenos ubicados en el barrio Bicentenario. El acto se desarrolló en el gimnasio municipal 17 de Octubre, con amplia presencia de vecinos, funcionarios y referentes institucionales.

Participaron del encuentro el diputado por la ciudad, Eloy Echazú; la secretaria de Planificación y Obras Públicas, María Grasso; la diputada nacional electa y secretaria de Producción, Moira Lanesan; la secretaria de Desarrollo Comunitario, Mónica Gutiérrez; la titular de Niñez, Julia Chalub; el responsable del Departamento Malvinas, Carlos Contreras, y el concejal de San Julián, Mauro Santana, entre otros.

Durante la entrega, Grasso subrayó que este tipo de acciones no son gestos aislados, sino parte de una política sostenida que busca garantizar el acceso equitativo al suelo urbano. “Muchas veces parece que el Estado no escucha, pero tiene que aparecer una decisión política para poder distribuir la tierra que nos pertenece a todos”, expresó. También agradeció al personal municipal y a cada familia por su paciencia y esfuerzo.

El jefe comunal puso el foco en la planificación urbana con inclusión: “El terreno tiene que estar acompañado de la decisión del Estado. No puede haber vecinos de primera y segunda. Todos deben tener las mismas oportunidades”. Además, anticipó que el 17 de noviembre será inaugurado el nuevo gimnasio ubicado en el barrio Municipal, Procrear y Favaloro, ratificando la continuidad de obras en diversos sectores.

Por su parte, María Grasso remarcó el proceso de regularización como una herramienta de seguridad jurídica: “Agradezco a cada familia que se acerca día a día a pelear por ese sueño. Con estos terrenos, empiezan a construir un hogar y un derecho”.

El acto fue también un espacio para reflexionar sobre el rol del Estado municipal en el acompañamiento social y la escucha activa de las necesidades comunitarias. Las familias que recibieron sus certificados podrán ahora avanzar en la consolidación de su vivienda, en un marco legal y con respaldo institucional.

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